Agradecimiento y aflicción hay en la Diócesis de Santa Rosa de Osos
Así lo afirma Monseñor Jorge Alberto Ossa Soto, en una carta dirigida a los sacerdotes y fieles en donde resalta la generosidad de la comunidad durante la Jornada Mundial de los Pobres, pero también expresa su rechazo por la ola de violencia que se presenta en los municipios de Ituango y Yarumal.
«Dios les pague a todos los que de una u otra forma fueron parte en esta jornada, porque hasta un vasito de agua dado por amor, el Señor nos lo retribuye amorosamente», afirma.
Así también, destaca que la jornada del pobre ha regalado «la oportunidad de visibilizar y compartir con el hermano necesitado.»
Por otra parte, expresa el «dolor y repudio por la violencia y zozobra» que se vive en las regiones del Bajo Cauca y el Norte. «Oramos por los hermanos que sufren, estamos enterrando a sus muertos en silencio».
Monseñor Ossa Soto lamenta que los niveles de violencia en esta parte del país evidencian que «otras cosas parecen importar más que la vida y la dignidad humana».